WOMAN TEN

Yo pensé que existías.
Cuando te vi por primera vez te acomodaste tan bien a uno de mis mil prototipos de mujer perfecta. Que pensé que existías.
Tus curvas eran impresionantes, unas cóncavas otras convexas. Sumadas daban forma a tu figura no tan robusta para esos entonces. Que pensé que existías.

Tu sonrisa, una mezcla perfecta de Policarbonato, PVC, Polietileno y Acero, fue muy real, hasta que la sumergiste en un Vaso de Wisky después de hacerte el amor en nuestra luna de miel. Motel Niagara 03:35 am. Que pensé que existías

Tu aliento para mi era como el néctar de una flor. Luego me di cuenta que específicamente era “Big Time” de sandía. Pensé que existías.

Nuestros ideales eran casi los mismos, “que caiga el sistema”, pero nunca se me paso por la cabeza un atentado explosivo en la moneda. Pensé que existías.

Hoy después de 5 años y 1 día aun te espero, quizás no tan ilusionado como la primera vez, ya que los comentarios que me han llegado de ti no son los mejores. Que eres más robusta y machita que cuando nos haciamos el amor en el Niagara…